El amor nunca es para siempre, el amor tarde o temprano se acaba. ¿Que fea manera de comenzar esta entrada, no? Pero es así, no hay vuelta que darle. Con el tiempo el amor es reemplazado por otros sentimientos y por otras actitudes. Tal vez ya no es la pasión abrasadora de los primeros meses, pero el paso de los años la reemplaza por comprension, la paciencia, la complicidad, conocer sus defectos y sus virtudes.
Bertha y Claudio se conocieron cuando eran niños, sus padres eran amigos de la infancia y medio en serio y medio en broma, se decían entre ellos, Seria fantástico que nuestros hijos se casen, no? No se cual de los dos lo profetizo, pero como ocurren en estos casos , termino sucediendo lo que tenia que suceder.
Braulio murio cuando Claudio tenia 7 años, y desde ese momento quedo a cargo de su tía materna, Simone la tia era una mujer magnifica, muy parecida a su hermana menor, la madre de Claudio. La madre de Claudio murió en el momento del parto y de ella solo queda una foto.
La providencia fue generosa con Claudio, le dio un hogar donde el era el único, mimado y engreído por los tíos, creció en un medio hostil, pero un muchacho ágil de mente y guapo supo salir adelante.
Bertha era la tercera hija de 8 hermanos, su madre una mujer practica y machista, de esas que se rompen un brazo para darle todo a sus hijos hombres y nada para las mujeres. Su padre Andrés tenia un corazón enorme amaba a todos sus hijos con tal intensidad que un ojo inexperto diría que los engreía demasiado.
Los años pasaron y los lazos entre ambas familias se rompieron, la muerte de Braulio en un partido de football (aquel que diga que deporte es salud! debería decírselo a Braulio) hizo un hoyo en el corazón de Andrés su mejor amigo. Bertha y Claudio hicieron su vida de la manera mas normal. Cada uno planeaba su vida por separado, sin saberlo tenia un destino común.
Para Bertha, la situación fue muy difícil, pues los planes de su madre miraban a que termine la secundaria, se case y tenga hijos y punto. Claudio tuvo el apoyo incondicional de sus tíos, las reacciones en sus familias no podían ser mas diferentes mientras en la casa de Claudio celebraron dos días seguidos su ingreso a la Universidad, Bertha no pudo compartir esa alegría, pues oculto a sus padres que había postulado y mas aun que había ingresado con a la Universidad entre los primeros puestos.
Estudiaban carreras diferentes pero afines y aunque no se reconocían aun, ellos se cruzaban casi a diario. Una tía lejana de Claudio falleció y el y sus tíos acudieron a aquel entierro, cuando ellos llegaban el vio salir a un rostro conocido, el negro no le favorecía para nada pero aun así la reconoció, sus ojos estaban llorosos e hinchados.
El se dio cuenta en ese momento que estaba enamorado y aunque a ella el siempre le pareció familiar, ver un rostro conocido le llamo mucho la atención.
La suerte estaba echada y los engranajes empezaban a moverse para juntarlos...
Ummm, la vida esta llena de casualidades, o será el destino que por muchos que nos empeñemos está ahí.
ResponderEliminarUn beso cielo
Espero la otra 1/2.
ResponderEliminarEl amor termina como muchas cosas en esta vida, pero puede haber "parte 2" ¿por qué no? eso de segundas partes nunca fueron buenas no es tan cierto. Besitos muchos querido Gary