Íbamos rumbo a la sala de descanso del 2do piso,
los sillones son más grandes y amplios y pocos pacientes saben que ahí esta la
salita más acogedora. Al costado de la salita están las habitaciones de los
pacientes, es una habitación enorme, que a su vez se divide en habitaciones
individuales y otras múltiples, en el centro de todo está la estación de
enfermeras, la ubicación es la ideal pues desde el centro pueden ver todas las
habitaciones y a los pacientes.
Tenemos solo 3 pacientes hospitalizados así que
todo es paz y tranquilidad, afuera hay un solcito veraniego en este otoño tan
extraño y limeño. Ahí estábamos los tres descansando los últimos minutos de
nuestro refrigerio.
De pronto vimos a un niño de chompa amarilla y
jean cruzar como una bala delante de nosotros, los tres nos dimos cuenta y la
enfermera se sobresalto, a esa hora la visita está restringida y los niños
pequeños no tienen acceso a hospitalización para evitar que adquieran una
bacteria indeseada.
Así que mi amiga resignada se para y va en busca
del niño para sacarlo amablemente, no es la primera vez que sucede esto pero
luego de unos segundos escucho que grita mi nombre y vamos corriendo en su
ayuda.
Al llegar a la habitación estaba solo la paciente
dormida, el niño no estaba. El niño que habíamos visto cruzar no estaba por ningún
lado, solo hay una ruta de salida y el niño no había pasado por mi lado, la técnica
que estaba con nosotros busco habitación por habitación y no había señales por ningún
lado.
La enfermera estaba asustada pues es la primera
vez que esto nos pasa de día, por un momento la habitación de la señora se inundo
de olor a galleta, si, ya se! es extraño, pero toda la habitación olía a
galleta. La técnica se persigno como tres veces y empezó a musitar una oración.
No fue una alucinación de eso estoy seguro, cogí
el rpc de mi trabajo y llame al de seguridad le pedí que nos muestre las imágenes
de la cámara de seguridad, ahí tampoco había nada, ningún niño de polo amarillo
y jean. No fue una alucinación, no creo que tres personas alucinen lo mismo en
el mismo momento. No entiendo que paso, creo que sé lo que es, pero me resisto
a pensar que los fantasmas aparecen a plena luz del día.
"Para quienes presentan alucinaciones, éstas les son bien reales. Para ellos en realidad sucedió".
ResponderEliminarBueno, he escuchado de alucinaciones colectivas pero de tres? jajajaja no lo entiendo aun!
EliminarAy mamita... que miedo y yo aquí solita esperando a Lalo!!!
ResponderEliminarpon música!
EliminarActualmente estoy practicando en un hospital y los pacientes cuentan cada cosa. El otro día uno de ellos dijo que se despertó a la 1am porque alguien golpeó la pared al lado de su cama y cuando miró hacia la mesa de noche vió a una persona parada sobre ella, que a los pocos segundos desapareció. Otro paciente más vió lo mismo y la médico dice que suele pasar en esa área porque es especialmente cargada, así que no lo toman como una alucinación sino como algo que en fin...
ResponderEliminarHay cada historia en los hospitales.
Saludos.
si, es terrible un dia contare las que me ha pasado y las que me contaron!
EliminarA no ser que se compartiera una ración de setas alucinógenas, lo más probable es que fuera un niño jugando al escondite. Los fantasmas no suelen salir de día.
ResponderEliminarUn saludo.
creeme en la dieta para el personal del trabajo no nos sirven (aun) setas alucinógenas jajajajaja, es lo que yo digo, no hay fantasmas de dia!
EliminarCuando éramos niños, a los tres hermanos mayores nos ocurrió algo similar, vimos a una bruja con todos sus secuaces, desde entonces no tolero a las brujas (suegras incluidas).
ResponderEliminarjajajajaja tanto asi con las suegras??!!! jajajaja
Eliminaruiii que mello, yo creo que son los hospitales donde se mucho mas eso, no?
ResponderEliminarpues si!
EliminarEn el Hospital Vargas, donde me formé en Caracas, decían que una de las monjas tarbesianas (de la congregación de San José de Tarbes que se encargaban en el siglo XIX de los hospitales en Venezuela) bajaba las escaleras del patio central del hospital. Nunca la ví pero ya sabes, de que vuelan vuelan...
ResponderEliminarSaludos
a mi una me susurro al oido, "no corras" yo naturalmente corri tan rapido como pude!
EliminarMenos mal que pocas veces he pasado la noche en un hospital o clínica. Pero de hecho que si existen los fantasmas pueden salir de día o de noche, cual sería la diferencia. Revisen bien las imágenes de la cámara de seguridad, ahí debe haber algo.
ResponderEliminarpues las revise y no hay nada solo se nos ve a nosotros corriendo, a la enfermera y la tecnica buscando como loquita habitacion por habitacion!
EliminarCon tu relato me acordé del hospital y las escenas en él, en la peli El Exorcista 3: Legion.
ResponderEliminaroooh yo recuerdo esa pelicula!! cuando el cura se queda pegado al techo y la piel se le queda pegada! uuuf! QUE MIEDO!
EliminarMe encanta.ajaja, Bueno, los hospitales son lugares llenos de pena, y sufrimiento. que triste.
ResponderEliminartambien hay alegrias muy intensas, cuando nace un bebe o cuando alguien que esta muuuy mal es arrancado de las manos de la muerte!
Eliminarhay de todo en un hospital, penas y alegrias.
Me hago la pichi carajo. Pero la hora no tiene nada que ver. Me ha pasado de día alguna cosa así, no ver, pero si que se cambie la emisora de radio y oir como se cierran y abren los cajones de los escritorios de mi oficina, como si alguien buscara algo, mientras yo estaba en el baño y estando la puerta de la ofi cerrada y yo con la única llave de la ofi en el bolsillo, buuuuuuuuuuuuu... Y era de día u.u
ResponderEliminarPero si olía a galletita no fue malo, era un almita joven y buena n_n
Becho <3
en mic hamba ha pasado de todo, creo que ya me acostumbre. Me jode cuando bota los archivadores eso si que me revienta jajajaja
EliminarPucha, me traumó tu post. Al día siguiente, en la mañana, estaba solita en casa, tendiendo las camas de mis hijas y en eso miro a la puerta y veo a un tío calato mirándome, buuuuuuaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!! Ya veo visiones :(
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