Yo
conocí a Luis Felipe cuando era un niño de 5 años, el era juguetón y de risa
contagiosa y gustaba de pelear conmigo. Hoy 10 años más tarde lo veo hecho un
pequeño hombrecito, al verlo me siento viejo. El es el motivo de esta entrada.
La
pelusa sobre sus labios, ese cabello rebelde que parece nunca haber conocido un
peine, su espalda ancha, sus pies enormes, ese mentón cuadrado y sus manos
enormes envuelven al niño que un día conocí. Ese engendro al que cargue y con
el que jugué algunas tardes. Creo que es momento oportuno para contar un
detalle importante de Luis Felipe, él es sordo. Fabiola su madre -mi amiga-
sufría mucho, el padre (otro farmacéutico) se desentendió del problema y formo
otra familia lejos de mi amiga. Fabiola ha trabajado mucho para sacarlo
adelante.
Conforme
iba creciendo Luis Felipe se iba convirtiendo en un “niño
problema”, su discapacidad unido al ser un niño sin padre eran los
detonantes de rabietas increíbles y mi amiga sufría mucho, porque tenía que
trabajar todo el día para costear los gastos que Luis Felipe necesitaba y ella
se encontraba en un mar de dudas, con ella conté un cuento para niños sin
padres y con ella conté un cuento para niños sordos, fue una experiencia
maravillosa, pero lo que cuento hoy es algo mejor.
Como
dije Luis Felipe era un chico problema hasta que conoció a Maria Gracia que
genero en él un cambio dramático. ¿Han escuchado hablar alguna vez a un sordo?
Hablan extraño, al no poder escuchar sus palabras generan sonidos raros.
Se
conocieron como se conocen la mayoría de parejas! en la oficina del jefe de
normas!!!! Luis Felipe fue enviado castigado (el primer día de clases!!) y era
el primer día de Maria Gracia en el colegio. Ambos estaban en 4to año, para
evitar el castigo el jefe de normas le pidió a Luis Felipe que lleve a Maria
Gracia al salón y ahí comenzó la historia.
No
fue fácil, así que aprovecho en contar otro detalle interesante, Maria Gracia
es casi ciega, una enfermedad degenerativa marchita sus nervios ópticos de
manera irreversible, según ella nos distingue como unas manchas borrosas.
Ambos
estudian juntos apoyándose el uno en el otro, se que la mayoría de nosotros no
pensamos en esos detalles, pero ¿te imaginas leer un libro en el sistema
braille? A mí se me hace un mundo. Ahora imagínate estudiar para un examen,
¿donde compran sus libros de historia los ciegos? ¿Cómo estudian trigonometría
los ciegos?
Y
aquí el amor ha creado una maravillosa simbiosis que a mí me enternece mucho,
Maria Gracia no puede leer así que Luis Felipe le lee y de esa manera ejercita
su vocalización, Fabiola, mi amiga recibe a Maria gracia como si fuera su hija
y Luis Felipe es el hombre de la casa, según me cuenta Fabiola su hijo ha
mejorado en todo gracias a su pequeña prometida.
Yo
bromeo con Fabiola ahora tienes que estar más
atenta que en cualquier momento te hacen Abuela y ella me responde
con un puñetazo en el hombro mientras toca madera. Fabiola se
debate ahora con la lista de útiles del último año de su retoño, mientras yo
veo que Maria Gracia acaricia la cara de Luis Felipe y con un gesto coqueto le
invita a que la bese (ahora si que me siento viejisimo!)
Qué historia tan más fascinante. Realmente inspirador y conmovedor. :)
ResponderEliminarPues si. Cuando fabiola me conto todo yo quede con la boca abierta
EliminarMuy bonita historia, muy romantica, muy ideal aunque parece un caso de la vida real. Me hiciste recordar al Jefe de normas del PRG, Chachi? seria como él? ,él que mencionas en tu historia?
ResponderEliminarLuis Felipe y Fabiola existen, Fabiola es de la primera promocion de mi facu!
Eliminarque historia tan entrañable, tan conmovedora, romantica, linda...ahh que bonito, me voy a la cama con una sonrisa en la boca :)
ResponderEliminarjejejejeje gracias
Eliminar¡No me chilles que no te veo! ¿No era así la película? Un post muy bonito Gary, ¿lo nominamos? Tiene que ser realmente difícil convivir con cualquier discapacidad. Lo que yo no entiendo muy bien es que tiene que ver que los veas enamorados y que te sientas mayor, chuchi.
ResponderEliminarBicos Ricos
Pues me senti viejo, porque he visto al enegendro que cargue y jugue a la guerrita en afanes de casi adulto! jejejeje
EliminarPreciosa historia... ¡qué bonito!... joer!
ResponderEliminarSon cosoas como éstas las que le hace a uno seguir confianzo en el ser humano, en su capacidad de superación y en su grandeza.
Verdaderamente, una historia real de personas muy, muy grandes.
Un abrazo. Angel.
Pienso igual! que fuerza la de Fabiola! Y sus los pequeños!
Eliminar¡OLÉ!
ResponderEliminar:) jajajajaja
Eliminar...muy bonita historia brother. Un caso muy especial.
ResponderEliminarsi, asi es!
EliminarEl amor todo lo puede, no es verdad?
ResponderEliminarefectivamente! el amor puede hacer que desarrollemos nuestras mejores capacidades!
EliminarMe los imagino juntos y ¡Oooouuuuhh qué lindos! es bueno el hecho de que una relación los ayude a que las cosas les vaya mejor en todo ámbito: emocional, estudios, amistad, cariño. Espero que siempre lleven una buena amistad :)
ResponderEliminarY la vejez llega, querido Gary. Yo recuerdo que cuando recién llegué al norte conocí al hermanito de una amiga que recién aprendía a leer y escribir y ahora ya está por pasar a secundaria!!! Cuando él me contó eso por chat, casi me desmayo!!
Saludotes! :)
jejejeje es gracioso! Son tan formalitos en su trato! el amor tiene muchas caras! y la de ellos es algo impresionante!
EliminarYo no puedo imaginar lo que sería volverme ciego o sordo ahora. Y eso que he podido ver y oir, lo que me permitiría imaginas colores y sonidos. Pero nacer sordo tiene que ser aterrador. No sé como a veces son capaces de superarlo.
ResponderEliminarCuando veo crecer a los niños de los demás también me siento viejo. En esos momento soy consciente del paso del tiempo... y sueño que aún soy joven y juego con esos niños.
Un beso (en silencio)
me siento igual que tu!!
EliminarUna historia muy bonita que nos enseña que, una vez más, el amor y la solidaridad humanas redimen cualquier situación, por difícil que sean... dale un abrazo, puesto que son reales, a todos los protagonistas de la historia, de mi parte, con lágrimas en os ojos...
ResponderEliminarLes hare llegar tus saludos!
EliminarQué historia tan lindaaaaaaa!!!! Se me hizo el nudo en la garganta. Qué lindo, cómo cambia a la gente el amor, verdad? Además, el hecho de sentirse útil, es importantísimo.
ResponderEliminarNo me imagino como hace una persona ciega para arreglárselas en el mundo y peor aun, para salir a la calle, es realmente admirable. En el ascensor de mi edificio, los números de los pisos están también en braille, alguna vez he cerrado los ojos, e intentado memorizar los puntitos, pero solo siento eso, puntitos por todos lados, no noto diferencia entre uno y otro. Cómo harán para leer palabras completas????
Besitooooooooo!!!!!! Muacks!!!
Pues si el amor cambia a la gente para bien (y a veces tambien para mal!)
EliminarEn algunos medicamentos vienen labrados los nombres en braille yo no tengo sensibilidad en la yema de los dedos! no creo que podria hacerlo!!
Jo majo, no veas qué bonito. Y qué envidia. Yo, en 25 años, nunca he sentido esa clase de simbiosis. Bueno, no sé si habré sentido alguna, en un sentido romántico. Pero historias como estas hacen pensar que en alguna parte está esa persona para cada uno. ¡Yo quiero un Mario Gracio!
ResponderEliminarY eso que he tenido que obviar varios detalles por falta de espacio! es una historia bonita la de estos pequeños, pero sin duda la principal protagonista es FAbiola!
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