El hermano de una
compañera de trabajo murió baleado en chorrillos, murió defendiendo a unos
peatones, era policía y murió abatido en un robo. Este tipo de tragedias son
tan comunes ahora que ya casi no llaman la atención. Patricia se puso muy
triste, ella es de esas chicas que siempre van por la vida con una sonrisa
sincera en la carita.
Todos quedamos en ir a su
casa a ofrecer nuestro pésame y acompañarla en un momento tan difícil. Llegamos
todos en dos taxis, encontrar su casa no fue difícil ya que estaba
relativamente cerca a la mía. Cuando llegamos la encontramos en su sala, triste
y llorosa, cuando nos vio se acerco a nosotros y estallo en llanto, todos la
abrazamos y nos hicimos uno, tratando de absorber su pena y diluirla.
Esa era nuestra intención,
así que la apartamos un poco de todos los demás y salimos de la casa, todos sus
familiares llegaban y ella prefirió quedarse con nosotros. Nuestra intención era
hacerla sentir mejor.
Y eso fue lo que hicimos,
empezamos a recordar todas las locuras que hemos hecho en estos años, los
paseos y viajes, las idas al cine, las peleas y todas las cosas graciosas que
nos han pasado.
Yo empecé a contar
algunos chistes que sabia y ya saben lo que eso ocasiona, el resto empezó a
contar sus chistes y cuando nos dimos cuenta, estábamos todos riendo a mandíbula
batiente frente a la casa del muertito!
A Elizabeth le dio un ataque
de risa! No paraba de reírse como loca, yo la sacudía para que se calme pero
nada resultaba ella seguía riéndose, doblándose, no tuve más remedio que
sacarla lejos de ahí, la hice caminar dos cuadras lejos de la casa de Patricia
y cuando por fin se calmo, pudimos recién avergonzarnos, cuando volvimos ya
para despedirnos de Patricia me sentía muy mal.
Patricia le dio un beso a
Elizabeth, no te preocupes hija le dijo, la tristeza se había vuelto a instalar
en el cuerpo de Patricia, yo la abrace y nos despedimos, ese tipo de heridas
demoran en curar, es difícil aceptar que alguien que quieres ya no está. Tan difícil
como aceptar que te reíste como nunca en un velorio.
Los velorios suelen ser un buen lugar para aprender y contar chistes, de ahí la frase "me morí de risa".
ResponderEliminarsi, la verdad que si! no sabes lo avergonzado que me senti!
EliminarAl menos hicieron que tu amiga pase un momento menos doloroso dentro de todo el mal que estaba viviendo.
ResponderEliminarUn beso!
Creo que si! y de aqui unas semanas tambien nos reiremos de este vergonzoso momento! jejeje
EliminarEs tan inexplicable, rotunda e irreversible la muerte, sea propia o ajena; que la risa necesariamente actúa como un escudo de la propia mente para poder mantenerse a flote y mínimamente equilibrada. Hicieron bien en hacerla reír un rato. Saludos!
ResponderEliminarparece que asi funciona!
EliminarMe ha pasado, he ido a muy poquitos, porque me da penita y soy bien torpe para estas cosas, yo me bloqueo. Pero si he ido a alguno y terminar muerta de risa, nunca falta un buen cuenta chistes por ahí :D
ResponderEliminarPobre tu amiga, qué roche, ya para un ataque de risa, tampoco. Pero cuando pasa, a más te quieren callar, peor te ries, buuuu...
Ojalá Patricia se recupere, nunca lo olvidará, qué terrible, ladrones de mierda, pobre chico, nunca sé qué decir en casos así :(
Becho
si, fue horrible e intempestivo, un dia estaba muy bien y esa tarde se le borro la sonrisa, debe ser horrible perder a tu hmno, si me faltase mi hermana creo que me muero!
Eliminarson las cosas por las que tenemos que pasar tarde o temprano. No soy de velorios, es más pensaría que si algún día yo estuviera en esa situación (de deudo) preferiría mi soledad.
ResponderEliminarYo no fui al velorio de mi abuela, no soportaba la idea de verla muerta.
EliminarYo no voy a velorios, no me gustan, pero se ubicarme en tiempo y espacio, jamas se me ocurriria reirme en uno de ellos, por sentido comun y por modales. Un abrazo.
ResponderEliminares lo que yo pensaba de mi mismo tambien, pero bueno parece que me equivoque
EliminarYo la hubiera echado de mi casa, me parece una falta de respeto muy grande reirse en un momento así.
ResponderEliminarbueno, las miradas que nos mandaron lo decian todo :(
EliminarYo tengo ese mecanismo de defensa mental en el que te sonríes ante un suceso trágico. Es terrible, me tengo que ir al baño pues es recontra incómodo, supongo que es algo del subconciente y debo parecer el demonio en persona pero no es intencional, supongo que si me hacen reír pues sería peor porque yo cuando tengo un ataque de risa puedo tirarme al piso y hasta llorar! caos total u.u Abasho!
ResponderEliminara mi me pasa igual, cuando estaba haciendo mi internado en el hospital militar donde todo es ceremonioso y serio no me aguantaba las ganas de joder, pero esta vez no lo hice a proposito la situacion se escapo de nuestras manos.
EliminarMe a pasado, pero creo que es casi normal en cualquier velorio.
ResponderEliminarpues al parecer es mas común de lo que pensaba!
EliminarNo sé porqué pero los velorios son los lugares donde uno más se ríe y chistes de todo tipo se cuentan, mientras uno ríe, los mayores te miran con cara de "Que falto de respeto" jajaja. Recuerdo en la secundaria las risas más incómodas eran durante la misa de los viernes...
ResponderEliminaren misa también me sacaron!! :(
EliminarEs un mecanismo de defensa natural ante el dolor, pero molesto para los dolientes, yo la verdad detesto los velorios, sí por mi fuera los aboliría.
ResponderEliminarpues si, se molestaron, pero Patricia entendió que no fue una falta de respeto, simplemente queríamos sacarla de su tristeza :(
EliminarHola. Lo siento tanto por tu amiga. Yo soy los de acompañar como que las penas se dividen aunque imagino que en esos momentos uno lo que desea es estar solo. Pero la resignación es cosa de tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo.
si, el tiro nos salio por la culata como quien dice, ella volvera al trabajo el viernes, espero ya este mejor!
EliminarSupongo que es un mecanismo de defensa de no se sí aceptación o evasión pero creo que estuvo bien regalar una risa cuando más de le necesita a alguien :)
ResponderEliminarEs lo que me he obligado a pensar, pero aun asi senti verguenza cuando senti las miradas asesinas que nos perforaban!
Eliminarjajajajaja muchas gracias!!
ResponderEliminarNo puedo ir a los entierros. Me río sin parar. No puedo evitarlo. Es difícil porque es el momento más triste de todos y no puedo acompañarlos. Intenté con una benzodiacepina a ver si no me reía y nada.
ResponderEliminarUna anécdota que seguro siempre te vendrá a la mente.
Saludos
Bueno, es la primera vez que me pasa algo asi! me senti mal ese sabado! pero bueno, escribirlo me ayuda a procesarlo!
EliminarRecuerdo un funeral en el que, de repente, se empezaron a escuchar unas risas entre los propios familiares de la difunta. Pero, no quedó ahí la cosa, sino que la risa acabó por contagiarse, y todos acabamos riendo, y no sé por qué. Por acá se dice que cuando pasa eso es que esa persona ya llegó al Cielo. Creencias aparte, creo que es una situación muy tensa, y es comprensible que acabe estallando de esa manera. La intención de ustedes los compañeros fue buena, así que tampoco hay que sentirse mal por ello. Un abrazote, Gary.
ResponderEliminarooh dios!! jajajaaja
EliminarNo sé si habré contado ya en alguna ocasión el día que me entró un ataque de risa en un entierro de un familiar lejano, es que cada vez que lo recuerdo me empiezo a reir, aunque por suerte, no me reía yo solo, una amiga mía a mi lado lo hacía más alto incluso que yo.
ResponderEliminarBicos Ricos
pero que indujo tu risa? la seriedad del momento? a mi me pasaba a cada rato en el hospital militar , donde todos estaban tan serios que me daba risa!
Eliminarseguramente ha sido una de esas risas que se hacen mas y mas fuertes para acallar las tristezas. por unos minutos la hiciste olvidar sus problemas. es lo q hace un buen amigo.
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